Paciencia

 

¿Cuánto tiempo crees que hace falta para que un instrumento que empezamos a tocar suene bien?

Al principio podremos sacarle solo unos sonidos, pero a medida que le dedicamos tiempo y lo convertimos en una prioridad, poco a poco va sonando cada vez mejor hasta dominarlo, y en algunos casos, y dependiendo de nuestra habilidad, conseguimos ser virtuosos.

Pero cuando se trata de trabajar con nuestra mente, nos desesperamos. Nuestra mente normalmente crea pensamientos y emociones que nos hacen sufrir, y queremos huir del sufrimiento cuanto antes. Pero no nos damos cuenta de que esa prisa va cargada de exigencia y de juicio, por no conseguirlo rápido, alimentado todo aquello que nos mantiene presos y nos impide avanzar.

Nuestra mente es un instrumento complicado y desconocido, queremos “manejarlo” con dos clases. ¡¡¡Eso es lo que nos frustra!! Observa tu mente con cariño, y aprende su funcionamiento y poco a poco te iras haciendo hábil. Tú no eres tu mente, como tampoco eres el instrumento que tocas. La mente es solo el vehículo con el que se expresa la conciencia que somos.  Con paciencia y dedicación, conseguirás hacerte diestro en su manejo para crear una bella melodía de vida.

Un afectuoso saludo a todos y muchas gracias por seguirnos.

-Mariate Aúz –